domingo, 31 de enero de 2010

Castillos de Guayana: Patrimonio nacional que requiere impulso turístico

Vista aérea del Fortín San Diego


Entrada al Fortín San Diego


Garita del Fortín San Diego


Vista aérea Castillo San Francisco


Patio del Castillo San Francisco al fondo el Rio Orioco


Cocina del castillo de San Francisco

Fuente: www.nuevaprensa.com.ve Guayana, 28 de enero de 2010 Escrito por Mayerling Velásquez
Estas importantes fortificaciones han resistido el paso del tiempo y guardan consigo un valor histórico y patrimonial que requiere el reconocimiento, admiración y protección de locales y visitantes La historia venezolana sigue latente en muchos de los lugares de la región Guayana. Museos, plazas, parques y hasta algunas casas remontan al ciudadano a aquella época donde la llegada de los españoles y la lucha por conquistar más espacios prevalecen en el tiempo.
Uno de estos representativos lugares, se trata de Los Castillos de Guayana, fortalezas ubicadas a 45 minutos de Ciudad Guayana, pertenecientes al municipio Casacoima del estado Delta Amacuro. Durante el recorrido al lugar, el visitante puede observar asentamientos campesinos, fincas, el río Orinoco, entre otros paisajes naturales.
Los Castillos de Guayana está conformado por dos fortalezas, una de ellas denominada San Francisco de Asís, construida entre los años 1676 y 1682, mientras que la otra lleva el nombre de San Diego de Alcalá cuya construcción se inició en el año 1734 bajo el mandato del entonces gobernador Juan de Dios Valdez, sin embargo durante el primer gobierno del General Joaquín Crespo estos nombres fueron cambiados por Fuerte Villapol y Fuerte Campo Elías como homenaje póstumo a estos dos héroes españoles que murieron en la lucha por la independencia de Venezuela.
Al recorrer el lugar se pueden notar la humildad y buen trato de su gente, los pobladores en su mayoría se dedican a la pesca y a la agricultura, mientras que otros laboran para la Corporación Venezolana de Guayana (CVG), organismo responsable del resguardo y mantenimiento del lugar por ser patrimonio nacional.
Valioso lugar con pocos cambios
A pesar de que los Castillos tienen más de 200 años, el poblado ubicado en la zona tiene apenas 35 años de fundado, allí viven poco más de 100 familias, quienes luchan por un mejor vivir. Los moradores afirman que de un tiempo a esta parte es poco lo que ha cambiado, no ha existido ningún tipo de desarrollo y afirman que la afluencia de visitantes a las fortificaciones ha disminuido considerablemente en los últimos años.
Pero la zona continúa siendo de agrado para locales y visitantes, las viviendas mantienen su fachada colonial, y esta no puede ser modificada sin previa autorización de la CVG. Zoraida Morales, residente de la zona quien tiene 35 años en el lugar, afirma que son pocos los cambios, “aunque no hay mucho que hacer se vive tranquilo”, sin embargo resaltó que las instituciones municipales muy poco han hecho por el lugar.
Con respecto a los mitos y leyendas de la zona, no hay mucho que destacar, algunos dicen que hace muchos años se escuchaba el sonido de caballos bajando a través de las escaleras de los castillos, y que todavía se encuentran monedas de cobre, las cuales eras usadas por los españoles para los años 1813 y 1817, las cuales servían para el intercambio comercial en la que antes se denominó, provincia de Guayana.
Los Castillos de Guayana: invariables testigos de los hechos históricos, que para aquel entonces cambiaron el destino de esta tierra y sus habitantes, fueron escenarios de importantes acontecimientos en la época de la conquista y colonización que operó en el río Orinoco, así como las luchas entre piratas ingleses, franceses y holandeses, que accedían a través del río Orinoco en búsqueda del codicioso dorado.
Mirian Rojas y Gladys Quiñones, provenientes de la ciudad de Valencia y quienes se encentraban de paso por el lugar, manifestaron que es la primera vez que visitaban los castillos, “La verdad es que provoca quedarse, están muy bien conservados, muy cuidados, vale la pena venir a visitarlos, son hermosos”, señalaron las turistas quienes para el momento eran las únicas visitantes en el fortín.
Sólidos e inmutables
Por ser patrimonio nacional, amerita ser conservado, protegido y admirado por locales y visitantes, estos castillos han perdurado en el tiempo, llevando consigo un gran valor histórico. Allí se muestran piezas arqueológicas que remontan a aquella época, aún se pueden observar cañones, monedas y armamentos utilizados para aquel entonces, y a pesar de que permanecieron abandonados durante el siglo pasado, fueron acondicionados para ser usados como guarniciones militares, durante la primera presidencia del General Joaquín Crespo.
Luego durante la dictadura gomecista, fueron nuevamente abandonados y no fue sino hasta la década de los sesenta cuando reciben nuevamente atención oficial, quedando bajo la tutela de la CVG, quienes a pesar de tener como meta, convertir la zona en un auténtico centro turístico y recreacional, moradores afirman que no existen proyectos que promuevan el turismo en la zona, y que a pesar de la importancia histórica que tienen las fortificaciones, los paisajes naturales que los rodean y la amabilidad de los lugareños, no se le ha dado la atención requerida, cada vez son menos las personas que los visitan y sus moradores no han sido partícipes de proyectos que mejoren su calidad de vida.
¿Cómo llegar a este destino?
Están ubicados a tan sólo 45 minutos de San Félix en la vía que conduce a Río Claro. A pesar de llevar el nombre Guayana pertenecen al municipio Casacoima del estado Delta Amacuro, sin embargo no dejan de formar parte de la región Guayana. Este lugar está ubicado a una distancia aproximada de 18 kilómetros de la comunidad de El Triunfo, en el camino podrá encontrar varios carteles que le informan la ubicación de los mismos. También podrá observar varios asentamientos campesinos, visualizar el río Orinoco y encontrar gente amable y sencilla.

miércoles, 27 de enero de 2010

Poblamiento de Taima Taima acapara atención mundial

Afiche de la inauguración del Parque Arqueológico y Paleontológico Taima-Taima, Estado Falcón, Venezuela



Inauguración Parque Arqueológico y Paleontológico Taima-Taima, Estado Falcón



Zona del yacimiento de Taim Taima protejida por techo aéreo atirantado



Exhibición de escena de cacería de Mastodontes en el yacimiento de Taima Taima


Instalaciones de protección y servicios de Taima Taima


Bases de la estructura modernista que protege el yacimiento Taima Taima


Fósiles de Taima-Taima, Estado Falcón


Fósil de Mastodonte Taima Taima, Estado Falcón

Fuente: www.abn.info.ve Agencia Bolivariana de Noticias (ABN) Fecha de publicación: Coro 09/09/05 (María Luisa Muñoz).
La teoría del poblamiento humano hace más de 14 mil años en el sector Taima Taima del estado Falcón acaparó la atención de invitados internacionales que participaron en un simposio celebrado esta semana en Coro.El investigador de la Universidad Nacional Experimental Francisco de Miranda (UNEFM), Orángel Aguilera, aseguró que se cumplió el objetivo de exponer ante la comunidad científica internacional las informaciones recopiladas durante tantos años de estudios.Aguilera, quien representó al país en el evento, tuvo la tarea de dar a conocer la revitalización y las nuevas interpretaciones generadas de la historia del poblamiento temprano en América, así como de la mega fauna.El profesor de la Unefm admitió que ahora el compromiso es mayor porque no se trata sólo de Taratara o Taima Taima, sino de la visión de Venezuela ante el mundo, ya que existe un patrimonio arqueológico de la humanidad que cuenta el legado cultural de más de 14 mil años.Resaltó el trabajo de investigación adelantado por organismos como el Instituto del Patrimonio Cultural, el Museo de Ciencias de Caracas, la Universidad Central de Venezuela y la UNEFM.Destacó que este esfuerzo ha permitido entender que no se trata de un fósil aislado, sino de un contexto cultural que hay que preservar para la historia contemporánea de Venezuela y del Continente.En este simposio, en el que participaron investigadores de Brasil, Colombia, Costa Rica, Panamá, Argentina y España, los ponentes coincidieron en los planteamientos de nuestro país en cuanto a la tesis de la presencia del hombre en América del Sur, específicamente en Venezuela, Falcón, hace más de 14 mil años.Sobre las reales posibilidades de integrar todo el esfuerzo investigativo en torno al Parque Arqueológico Taima Taima, inaugurado recientemente por el ministro de la Cultura, Francisco Sesto, Aguilera opinó que se trata de la unión de arte, cultura, ciencia y comunidad.“El parque apenas se inaugura y comenzamos con buen pie, porque nuestro piso es muy sólido, ya que tenemos excelentes fundamentos desde el punto de vista de la potencialidad científica y académica”, manifestó el profesor de la Unefm.Aguilera agregó que este proyecto se apoya en la coexistencia con los habitantes de las zonas adyacentes como La Vela, Taratara, Muaco y La Aguada, poblaciones rurales del municipio Colina, de esta entidad, sobre quienes recae la corresponsabilidad en la custodia y mantenimiento del lugar.Mientras, el científico español José Luis Ponga, representante de la Universidad de Valladolid, mostró su asombro al ver concentrada tanta riqueza arqueológica, paleontológica e histórica como en la zona de Taima Taima.Resaltó que apostar al éxito del parque arqueológico construido en el lugar, es apostar a ganador; sin embargo, conminó a seguir trabajando para hacer realidad allí un ecomuseo o parque temático.Ponga propuso prever las posibles fallas en torno al proyecto, las cuales pudiesen estar relacionadas con la captación de turistas a través de la construcción de posadas y restaurantes en las mismas áreas de influencia del parque.Cabe resaltar que el Parque Arqueológico y Paleontológico Taima Taima, está dentro de las 1.480 hectáreas en las que se proyecta la construcción de un núcleo de desarrollo endógeno que ofrecerá todo tipo de servicios turísticos a los visitantes.

martes, 26 de enero de 2010

Quebrada Taima-Taima estado Falcón

Dibujo de cazador escena del origen del Hombre Americano


Playa Taima-Taima, Estado Falcón

Publicación científica de los fósiles de Taima-Taima (clip en la imagen para aumentar)


Fósil de mastodonte y pequeña punta lítica de flecha asociada al hombre de Taima-Taima



Sitio arqueológico de Taima-Taima Estado Falcón

Gracias a exploraciones petroleras realizadas por la Shell hace unos 40 años, en Falcón se descubrió La Quebrada de Taima-Taima, situada a unos 20 kilómetros al este de Coro, todo un reservorio de fósiles de flora y fauna del Pleistoceno.
Allí también se encontraron herramientas humanas con una antigüedad de unos 13.500 años con una doble importancia: se trata de fósiles prehistóricos y muestras de cultura primitiva.

Nuevo libro sobre Cruxent


Recientemente salio publicado una novedad para la bibliografia Venezolana se trata del libro de Ferran CABRERO
2008 "Cruxent, l`experit de la materia”
Mediterranea
256 p.

Cabimas alberga un tesoro arqueológico de 14 mil años de antiguedad

Excavaciones arqueológicas en Cabimas, Estado Zulia


Fuente: www.laverdad.com/ Maracaibo, 4 de junio de 2007 Nathaly Durán http://www.antiguaymedieval.blogspot.com/
Cabimas es la segunda ciudad de referencia petrolera venezolana. En su evolución histórica intervienen factores demográficos, económicos, sociales, políticos e históricos, que incidieron en el pasado prehispánico de los primeros pobladores de la Costa Oriental del Lago.Israel Vicuña, historiador, explicó que el nombre de este municipio proviene del árbol copaiba, que al ser talado segrega una resina llamada Cabimas. Fue utilizada por los primeros pobladores en los caseríos de la costa para curar enfermedades.Bajo el suelo de esta región reposan fósiles y un viaje de milenios en la historia de la humanidad. Hace tres años se encontraron en la hacienda El Esfuerzo, en el sector Curazaíto, dos vasijas. Estas simples piezas de barro se convirtieron en la llave para estudiar una historia que muy pocas veces ha sido contada.Una mirada al pasadoEstudiosos alegan que el hombre americano entró por el estrecho de Bering hace nueve mil 500 años antes de Cristo. Como prueba de esta teoría alegan las innumerables puntas de flechas que se han encontrado en Norteamérica.Otras evidencias ponen en duda la antigüedad del hombre americano, como un yacimiento arqueológico ubicado en Taima Taima, Venezuela, de hace 14 mil años, convirtiéndose en el más antiguo de América.Nelángela Baudino, investigadora, hizo un documental sobre los hallazgos arqueológicos que se han suscitado en la COL, en el que constató que estos yacimientos podrían estar bajo la influencia de Taima Taima, donde estaría la clave de la antigüedad del hombre americano."Para el siglo XV había en esta región pueblos de fijación caribe, filiación Arawac y de otras ramas no precisadas. En la parte oriental de la Península Guajira había pueblos recolectores donde habitan Los Caquetios que estaban en estrecha relación comercial con Falcón, y es por eso que su cerámica se denomina dabajuroide."Para que haya existido una cultura tan estable, de más de tres milenios en toda esta zona, se supone que hubo una evolución lenta de la misma cultura. "Taima Taima y Cabimas pueden ser expresiones de dos momentos históricos de la arqueología indígena que va desde el sur de centro América hasta el oriente de Venezuela y puede extenderse hasta 14 mil años de antigüedad".Hallazgos ImportantesEl equipo del Museo Arqueológico de Cabimas, dirigido por Lino Meneses, antropólogo, ha excavado dos yacimientos arqueológicos. En 2002 llegaron hasta el sector La Misión donde ubicaron un cementerio indígena cuyo fechado es de mil 400 años de antigüedad.En 2004, la hacienda El Esfuerzo en el sector Curazaíto fue escenario de un gran hallazgo: un gran contexto arqueológico asociado a necrópolis de entierros secundarios o bien cementerios indígenas. Según Meneses, se consiguieron otras evidencias como las vasijas utilitarias, lo que afirma la existencia de espacios habitacionales.A finales de ese año estos cementerios habían aportado cerca de tres mil fragmentos cerámicos y más de 35 urnas funerarias. Los análisis se hacen en los laboratorios de la Universidad de Los Andes.Investigadores del pasadoAlberto Fernández, fundador del Museo Arqueológico de Cabimas, se sintió atraído desde niño por la historia prehispánica. De manera autodidacta recolectó piezas arqueológicas en su pueblo de origen: Urumaco, en el estado Falcón. Al llegar a Cabimas en 1991, fundó esta institución con otras personas preocupadas por resguardar el pasado aborigen.Es una institución sin fines de lucro. Se dedica a investigar el pasado prehispánico de los municipios de la Costa Oriental. Difunde la historia en los centros educativos de la región para contribuir con la formación de un ciudadano que se identifique con su entorno.Yamila Vicuña, presida del museo, explicó que cuentan con una importante colección arqueológica producto de los hallazgos realizados en Falcón y Cabimas, (sector La Misión y La Mesa), Santa Rita (El Gamelotal) y Simón Bolívar (sector La Peña), donde se localizaron cementerios indígenas cuya data se estima entre 900 y mil 400 años de antigüedad.Se mantienen por autogestión y algunos aportes de Fundacultura. El Conac tiene dos años que no les envía presupuesto.Hacia dónde vanEntre los proyectos que tiene el Museo Arqueológico de Cabimas destaca la elaboración de un mapa en el que se reflejarán los sitios de ocupación de los aborígenes que habitaban en la Costa Oriental.Se estudiarán lugares del municipio Bolívar en los que se han detectado yacimientos arqueológicos.

Zulia-Mérida: Hallan vestigios de un pueblo milenario

Arqueologia de El Roble limites de los estados Zulia-Mérida

Fuente: http://www.lamaracucharadio.com/ Maracaibo,19 de julio de 2009
A un metro de profundidad, en la zona de El Roble, entre Zulia y Mérida, unos campesinos hallaron restos de lo que fue una antigua comunidad indígena que ahora son analizados por arqueólogos. Hallaron fogones, restos cerámicos y alimentos cuya data se ubica entre los años 900 y 1.400 D.C. La excavación arqueológica se realizó en junio. Investigadores encontraron una diversidad importante de cerámica decorativa.
Maracaibo, 19 de Julio de 2009.- Dentro de esa “zona en reclamación” entre los estados Zulia y Mérida, en el Sur del Lago de Maracaibo, se encontraron vestigios materiales del asentamiento de dos comunidades indígenas en el sitio El Roble, que suma unas 30 hectáreas sembradas de plátano y parchita.
A 40 minutos de Santa Elena de Arenales, capital del municipio merideño Obispo Ramos de Lora, y a unos cuatro kilómetros del Lago, el paso de la rastra para cultivar afloró material cerámico y lítico de la primera ocupación.
Según Lino Meneses, coordinador del Museo Arqueológico Gonzalo Rincón Gutiérrez, de la Universidad de Los Andes (ULA), la presencia de metates o piedras de moler revela que esta comunidad, ubicada en el estrato más superficial, sembraba granos, especialmente maíz.
Los fragmentos de budare, donde se hacía el casabe o tortas de yuca, indican que este grupo indígena cultivaba y consumía este tubérculo.
En esta excavación, realizada desde junio de este año, participaron los estudiantes de la séptima cohorte de la maestría en Etnología, mención Etnohistoria, de la ULA,
Durante la jornada, Nátali Herrera, estudiante de la maestría en Etnología, sacó a 80 centímetros de hondo una bandeja con un rostro humano en el asa y dijo estar emocionada por tener piezas de gente que vivió hace cientos de años en estas tierras.
Si bien está alterado, el material hallado en los primeros 40 centímetros de profundidad “nos servirá para construir formas y tipología que compararemos con las características de materiales encontrados en otros sitios arqueológicos del Sur del Lago”, expuso Meneses.
Excavando aún más, a un metro de profundidad, se consiguió un fogón, que “para la arqueología es muy importante, porque nos permitirá obtener no sólo información sobre la tipología de la cerámica, sino saber qué consumían y qué alimentos preparaban estos antiguos habitantes del Sur del Lago”, explicó.
Sin el trabajo de laboratorio, se puede determinar a simple vista que esta comunidad indígena, cuya data se calcula entre 900 y 1.400 años D.C., basaba su dieta en recursos lacustres, tubérculos y granos.
Las primeras deducciones vinculan el sitio El Roble con El Ranchón, conocido como Caño Zancudo, contextos separados apenas por cinco kilómetros. En este último lugar Mario Sanoja excavó un montículo en la década de 1960, donde consiguió un fogón, restos óseos humanos y cerámica.
El cronista del municipio Obispo Ramos de Lora, Oscar Méndez, apuntó que el Sur del Lago cuenta con muchos puertos: Gibraltar, Santa Rosa, Mucujepe y Santa María. Además, los caños y ríos que circundan la zona hace pocos años eran navegables, como caño Mujeres.
Asimismo, según Meneses, también se vincula con el sitio de Onia, otro poblado del Sur del Lago.
“Estamos planteando un amplio territorio de un mismo grupo indígena distribuido en varias aldeas, porque convivían en zonas pantanosas. El Roble y El Ranchón son sitios no inundables e idóneos para asentarse y practicar la agricultura”, explicó el arqueólogo.
Aparentemente este grupo de lengua chibcha está emparentado con los antepasados de los barí, por la cerámica diagnóstica, las decoraciones con incisiones y las bandejas con apliques antropomorfos (figuras humanas).

Las rutas de Altagracia

Ubicacion de Los Puertos de Altagracia Estado Zulia, Venezuela


Vasija precolombina antropomorfa del Museo del Hombre del Municipio Miranda del Estado Zulia


Casa histórica de Pueblos de Altagracia


Iglesia Nuestra Señora de Altagracia


Casitas coloniales de Pueblos de Altagracia

Fuente: www.laverdad.com/ Maracaibo, 24 de enero de 2010 Reyna Carreño
Fotos: Eris Vásquez
Cuando los zulianos piensan en Los Puertos de Altagracia lo primero que evocan es una playa enor­me, palmeras, brisa, fuerte oleaje y el sabor del pescado frito, crujiente y sabroso.
Sin embargo, Altagracia es mucho más que eso. El muni­cipio Miranda posee grandes atractivos turísticos, diversi­dad cultural y hermosos pai­sajes; pero sin duda su arqui­tectura colonial representa un aspecto importante, sobre todo el casco central, lleno de museos y de historia.
Los Puertos, como se le co­noce popularmente, cuenta con un patrimonio arquitec­tónico, cultural y turístico muy amplio. El Centro Histó­rico, el Museo del Hombre, el Museo Gabriel Bracho, la iglesia Nuestra Señora de Al­tagracia, el bulevar Padilla, el Complejo Ferial, y distintas plazas, figuran entre sus joyas más valiosas situadas en lo que se denomina el Casco Histórico y Turístico, distri­buidas en cuatro avenidas que conforman las raíces de esta ciudad.
Al alcance de todos
Ahora es más fácil reco­rrer los sitios de interés que están en Altagracia, ya que Susana García, a través de su empresa Ciudad Turismo, se ha encargado de trazar una ruta desde Maracaibo hasta el municipio Miranda, en un recorrido que lleva el nombre de Las Rutas de Al­tagracia.
El tour sale desde Mara­caibo y los viajeros se despla­zan en un autobús de lujo. Las estrechas calles de Al­tagracia dan paso, a duras penas, al enorme automóvil que se desplaza lento, por una ruta que Susana García tardó un año en trazar, dadas las condiciones del trayecto.
Susana y su esposo Carlos Atencio, procuran que los pasajeros tengan todo al al­cance de la mano: agua, re­frigerios y todos los consejos necesarios para que el pa­seo transcurra sin contra­tiempos.
La primera parada es en el Museo del Hombre, una escuela de primeras letras que se convirtió en museo arqueológico, donde se guardan los restos encon­trados en el cementerio in­dígena más grande de Vene­zuela, ubicado en el Meco­cal. Piezas que tienen más de 800 años de antigüedad.
El recorrido sigue hasta la plaza Sebastián Miranda, donde se encuentra el fa­moso mural realizado por el artista plástico Gabriel Bra­cho. Allí el historiador Ra­món Luzardo describe el contenido pictórico de la obra y relata pasajes de la historia del municipio.
Las próximas paradas son en el Centro Histórico y Cultu­ral de Altagracia y en el Museo Gabriel Bracho, de la mano de Luzardo que sigue tejiendo anécdotas y rememorando el pasado histórico de la zona.
Al mediodía, el recorrido desemboca a orillas del La­go, donde los viajeros dis­frutan de un delicioso al­muerzo en el restaurante La Taberna de María, ameniza­do con música en vivo inter­pretada por el grupo Miran­da de Antaño.
A media tarde de regreso a la plaza central, donde se puede disfrutar un “cepillao de carrito”, y de allí una visita a la iglesia Nuestra Señora de Altagracia, corazón religioso y espiritual del municipio. Al caer la tarde comienza el re­torno, los visitantes acusan cansancio pero están satisfe­chos por la aventura vivida y en el pecho llevan ansias de regresar.